Entre mis brumas he intentado retener
la débil sombra de un infantil anhelo,
la sonrisa limpia, el gesto alegre,
la cartera a cuadros… El fugaz momento
que tarda la cámara en inmortalizar
una imagen que se pierde en el tiempo.
Todavía, grabada en mi memoria,
permanece la luz que el desconcierto
colocó en mi rostro aquella cámara
cuando una tarde, casi sin aliento,
bajé las escaleras de dos en dos,
gritando “¡Voy a la escuela, pronto vuelvo!”
¡Quién me iba a decir que, sin paraguas,
vagaría hoy, de invierno en invierno,
llevando mil tesoros heredados
escondidos entre los dedos!
Cáusame unha inmensa ternura recordar contigo, entre versos o tempo de camiñar á escola, chovendo, sen medo a nada, cos coloretes e o flequillo frescos coma a nosa inocencia. Se parece que fai unha eternidade...e aínda estamos medrando!. Apertiñas
ResponderEliminar¡que bonitos recuerdos!
ResponderEliminar¡que nena mais bonitiña!
ese vestidiños curtos... e ese paraguas mais grande que ti...
¡que gusto da ver esas fotos!
biquiños,
Aldabra
Un poema moi fermoso e a nena da foto moi previsora, xa se facía acompañar polo paraugas, por se caía un torbón, non si?
ResponderEliminarBicos
¡Qué mirada limpia!¡qué poeta venía por el camino!
ResponderEliminarFermosa foto con un texto moi apropiado .
ResponderEliminarComo din, en Galicia o paraugas que non falte, inda que hoxe por hoxe e con isto do cambio climático, ca vez fai menos falta.
Saudos.-
Nadie nos dijo nada, puede que sea mejor así.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho tu poema, Concha, y la fotografía, unida a él.
Un abrazo
Ío
· Y no has vuelto. Hay lugares desde los que nunca se vuelve.
Y vagas, pero con más paraguas de los que ves a tu alrededor. Busca y encontrarás.
· Bicos
CR & LMA
________________________________
·
A nena do Paraugas foi un día para a escola con ese sorriso, alegre e confiada, coma se xa soubese que ese sería o seu mundo.
ResponderEliminarBicos